Cuando estas de vacaciones largas... incluso hacen falta unas vacaciones de las vacaciones.
El primer día en Bruno no hicimos otra cosa que descansar. Además, como no estábamos en casa de ningún couchsurfer disfrutábamos de más autonomía.
El segundo día por la tarde, salimos a recorrer Brno.
Desde luego no tiene ni las medidas ni la soberbia de la ciudad de la que veníamos: Praga. Pero sigue en la linea de edificios bien cuidados y recién pintados, lo cual es una gozada para la vista.
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| Carmina preparó este rico arroz caldoso. |
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| Trabajando en el blog |
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| Comiendo un helado Checo |
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| La catedral |
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| La catedral por dentro. Presenciamos una misa húngara. |
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| La iglesia roja. |
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| No descubrimos el porqué. pero esta señal echaba humo por un tubo. |
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| Las calles tienen dos nombres. uno no se usa y es de cuando la república checa era comunista. |
Para cenar fuímos al PEGAS, un restaurante de Brno donde es famoso su Gulás, un plato típico de la República Checa. El gulás lo recomiendo de verás. Es un plato con carne de toro cocida. Lo sirven con una cantidad abundante de salsa. Es de sabor intenso y viene acompañado de un pan especial para mojar en la salsa.
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| detalle de la entrada del Hotel PEGAS. |
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| El gulás |
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| Estaba buenísimo. |
¡Y nada más, mañana nos vamos a Viena!
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