Rumbo Tarascon.

         
El día amanecía y nos propusimos a llegar a Tarascon-sur-Ariège.

Desayunando un poco antes de la caminata.

El Casino de Ax-les-Thermes de fondo.

Rumbo a tarascon

El camino hasta Tarascon lo hicimos por carretera. Lo cual no era muy bonito, pues pasaban muchos coches. Por suerte, aun encontré algo en el borde de la carretera que me alegro el viaje. ¡Era un enorme caracol francés!

(Para hacer este foto-reportaje, ningún caracol fue maltratado ni devorado. Además, he de decir que terminamos siendo buenos amigos. Cuando terminé de hacer las fotos, le dí un besito y lo solté por el campo.)

Puro amor.

Andados unos 10 kilómetros, un hombre se detuvo con su coche y nos dijo que podíamos subir. Fue muy amable con nosotros, pues el era de Les Cabannes, un pueblo que esta mucho más cerca que adónde íbamos. Aún así, nos llevo hasta Tarascon y por si eso fuera poco, llamó con su teléfono a la persona que nos tenía que acoger allí. (Si, nuestros teléfonos españoles no funcionan).

Una vez encontramos a Guillaume, nuestro anfitrión couchsurfing, nos enseño su piso, hablamos un poco, y dijo que tenía que irse y que volvía hacía las 6 o 7 de la tarde.

A esas horas salimos a dar un paseo para conocer un poco el pueblo.

Guillaume jugando con Carmina.

Luego, ya en casa y antes de cenar, Guillaume nos dijo que si queríamos bever algo.

"¿Que queréis Be-VER?"

Mañana, si el tiempo lo permite, nos vamos a hacer montañismo con Guillaume. ¡Ya os cuento!

Ax-les-Thermes. Último día.

Mañana nos vamos a Tarascon-sur Ariège. El plan es ir caminando por la carretera nacional hasta allí. Son 26 kilómetros... Así que pensamos tomarnos el día de relax, descansando y disfrutando del apartamento.

Entrando en el apartamento

Uno de los cuadros de la casa. Esta pintado sobre una antigua puerta de una ventana. Se lo regaló un amigo que iba por el mundo viajando con tan solo el dinero que recaudaba vendiendo sus cuadros durante el viaje.
Pone "EINSAM" que en alemán significa: "SOLEDAD", es por eso que lo puso detrás del televisor. 

Carmina se notaba que no estaba pasándolo mal... ¡Vaya ataques de risa que le daban!

A pesar de la tranquilidad de estos días, entre ayer y hoy, también ha habido tiempo para dar unas vueltecillas por lindos bosques y encontrar algunas setas...

Esta no la conozco...

Esta me suena que se come...pero por si acaso la dejo.

Estas no tienen buena pinta...

¡ESTAS SÍ! ¡Ya veras como me las como!

Primero las limpio...(les quito los rabos que están muy duros)

¡Y pá dentro!

¡Y nada más! ¡Ya os cuento que nos pasa mañana en el camino hacía Tarascon!

¡Adiós Ax-les-Thermes!

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Mercadillo en Ax-les-Thermes

De casualidad, encontramos un mercadillo en la calle. Y como a Carmina y a mi nos gusta mucho el ambiente de los mercadillos, disfrutamos de un rato estupendo.

En Francia las alcachofas son gigantes

Paradas de verduras francesas. En el fondo, arriba de los champiñónes, se ve algo de color beige que no se que es.

Quesos franceses.

¿Paella francesa?

Paradas decoradas.

En las carnicerías no siempre sabes que es cada cosa.

Venta de piedras en el "mercadillo del Jueves"

¿Veis todos esos salchichones? Pues los probamos todos.

Martinne, la de los salchichones, hablaba español y nos atendió como a reyes.

Y me afilaron mi navaja de Albacete:

Ax-les-Thermes.Día 2

Ax-les-Thermes es un pueblo curioso. Tiene solo 1500 habitantes, pero hay en el una actividad económica bastante fuerte. (Tienen hasta un gran casino).  Eso se debe principalmente a que se encuentra en una ruta de paso hacía Andorra. Los franceses van en tropel todos los días a Andorra para comprar licores y tabaco, y Ax-les-thermes es un buen lugar donde hacer una paradita para descansar del viaje.

Aparte, viven de la temporada de la nieve, y del encanto que supone tener un pueblo en que brotan fuentes de aguas termales por doquier.

Cuando llegamos, preguntamos a nuestro anfitrión David, que cuanto costaba entrar en los baños termales y nos dijo que a 17 euros cada dos horas. Como nos leyó en la cara de que no íbamos a gastarnos ese dinero nos llevo en coche hacía la montaña, a unas balsas de agua termales naturales en medio de la naturaleza.

No llevábamos la cámara, pero David nos hizo esta foto.

Allí nos empezó a llover, y bajamos la montaña por un camino de piedras precioso. Lastima que no llevará la cámara de fotos encima.

A continuación os pongo fotos de algunas de las cosas que podéis encontrar paseando por ax-les-Thermes.

Balsa con agua caliente natural...La gente se moja los pies en ella, ya que es terapéutico.

Sale agua que alcanza los 60 grados

Peligro de quemarse.

Ni se os ocurra beber de estas fuentes.

Carmina se mojó los pies en agua calentita.

Aguas termales por todos lados. 

Antigua campana de la iglesia.

La iglesia

Aquí os dejo este curioso vídeo:

Esto es una cadena de Panaderías que hay en Francia.
 Política de la empresa: "Si la maquina de cobro no funciona hoy, te lo llevas todo gratis."