Caminata a Ayodar

Para ir entrenando las piernas y probando las mochilas, Carmina y yo fuimos este Domingo desde Artesa hasta Ayodar andando. Son unos 13 kilómetros y tardamos unas tres horas. Pudimos disfrutar de buenos paisajes y subir y bajar unos buenos desniveles.

En mi mochila habían 12 o 13 kilos, y comprobé que eran demasiados. De 7 a 9 kilos se hará más llevadero el viaje.

Os dejo unas fotos:

En nuestra caminata nos acompañaron Carmen, la madre de Carmina, y Estefa, la cual nos hizo una foto y un video:

¿Donde vamos a dormir? Couchsurfing

Cuando decidimos realizar este viaje caminando por el mundo, nos propusimos gastar el mínimo dinero posible. Para ello, íbamos a dormir en tienda de campaña siempre que pudiésemos y lo combinaríamos durmiendo en albergues una vez estuviésemos en grandes ciudades. Cabía otra posibilidad, que era el quedarnos en casa de gente que nos ayudara por el camino. Quedarnos a dormir en casa de ellos a cambio de tareas domésticas que nosotros pudiéramos realizar. Tales como: hacer de comer, fregar, arreglar el jardín, hacerles masajes o Reiki...

Como idea no estaba mal y la aceptamos de buen grado, pero esa bonita idea se topaba con otras ideas preconcebidas menos agradables: ¿Estamos seguros de poder dormir en tienda de campaña cada noche? ¿Podemos hacer eso sin tener problemas con la policía local? Y lo de dormir en casas de gente que no conocemos.,. ¿Quién se puede fiar de una pareja que va con su mochila haciendo autostop por la carretera? ¿Acaso no será difícil o cuanto menos extraño, pedirle a alguien que si puede alojarnos una noche en su casa a cambio de hacerle de comer o limpiarle la casa?

Fue tiempo después cuando a Carmina le hablaron de Couchsurfing. Cuando investigamos sobre que era eso de Couchsurfing, empezamos a usarlo y nuestro plan sobre donde íbamos a dormir en nuestro viaje cambió a algo bastante menos inquietante.

COUCHSURFING

Couchsuring es una web de internet. Cualquiera puede apuntarse. La gente que pertenece a la comunidad Couchsurfing ofrece un rinconcito de su casa para alojar a viajeros. Puedes ofrecer una cama, un sofá, o incluso el suelo de tú casa.

A cambio de ofrecer al resto de la comunidad tu casa, tu puedes viajar a las viviendas de cualquier usuario de Couchsurfing.

Pero la filosofía de Couchsurfing no es dormir de gratis en casas ajenas, sino el poder ayudarse unos a otros, intercambiando la cultura, los conocimientos, las anécdotas de viajes... etc,  y en caso de la persona que acoge al visitante, servirle de guía sobre las cosas que puedes visitar en su ciudad, cosas a tener en cuenta por esa zona, o para resumir, intentar ayudar a la gente que hospeda.

Esta filosofía me conmovió y nos terminó de convencer para introducirnos en la comunidad Couchsurfing. Para ello tuvimos que entrar en la web, rellenar un formulario contando cosas sobre nosotros y el lugar que teníamos para acoger gente y finalmente  pagar 20 $ con tarjeta de crédito. Después de este pago, tienes todos los servicios gratis para siempre, y puedes empezar a acoger gente o a visitar casas de otros miembros de inmediato.

De momento hemos acogido en nuestra casa a dos argentinos, un valenciano con su hija pequeña, un italiano y a un chino. Y la experiencia ha ido bien. Además de pasar buenos ratos con ellos, hemos aprendido muchas cosas sobre viajeros y sobre Couchsurfing.

Además, cada vez que hemos acogido a alguien, nos han dado una referencia. Las referencias son las opiniones que tienen los usuarios que acoges o te acogen. Esto sirve para aumentar la confianza entre usuarios. Ya que uno es libre de si quiere acoger a alguien en su casa o no. Alguien que tiene muchas referencias positivas, siempre tendrá más posibilidades de ser acogido que alguien que tiene referencias negativas. De momento nosotros parece que somos buenos anfitriones ya que todas las referencias han sido positivas.

Para acabar decirte que si quieres viajar de forma económica esta puede ser una opción, pero no olvides de que Couchsurfing no es solo una pagina web donde encontrar lugares donde dormir de gratis, sino que vayas donde vayas, deberás conocer a las gentes que te acogen, charlar con ellas y compartir con ellos un tiempo. ¡Elige bien donde quieres quedarte sino quieres tener una mala experiencia!

Y así, Carmina y yo, en lugar de ir por el mundo sin saber hacía dónde ni como, trazaremos rutas en las que haya usuarios Couchsurfing dispuestos a ayudarnos. Veremos que pasa pues hemos acogido a gente pero todavía nos queda probar como es ser hospedado en su casa por un usuario Couchsurfing.

Para quién quiera saber mas sobre Couchsurfing, dejo este enlace:

https://www.couchsurfing.com/

¿Cuánto tiempo vamos a estar fuera?

Eso si que es una incógnita. ¿Una semana? ¿Un mes? ¿Un año? Creo que todo dependerá de como nos lo estemos pasando.

El nuestro es un viaje moldeable como la plastelina. Seremos flexibles con nuestros destinos y de igual forma seremos flexibles con el tiempo empleado en cada uno de ellos. Moldearemos figuras por el camino, y las desharemos con la misma facilidad. Como si fueramos niños. Sin reglas. Sin ataduras.

Por fortuna, ni Carmina ni yo nos vemos sujetos a ligaduras externas. Ni tenemos hipotecas, ni hijos, ni trabajos donde tener que fichar un día concreto. Eso nos facilitará las cosas. Solo tenemos que ponernos en marcha... y que el destino se encargue del resto.

Osea, sabemos cuándo saldremos, pero no cuando regresaremos.

Y ya veis, ojalá pudiera ser más concreto, pero no soy vidente, y no se que nos deparará el futuro.